Entrega de Rincones de Juegos
Estudiantes de pre kínder de la Escuela Básica Llano Subercaseaux- dependiente de la Corporación Municipal de San Miguel- recibieron ayer sus Rincones de Juegos, una metodología que apoya el aprendizaje de manera entretenida.
La idea es aprender jugando. Claro, porque los Rincones de Juegos son para la enseñanza fuera del aula. Se trata de carpas que pueden ser transformadas en distintos escenarios para que se diviertan guiados por sus padres o cuidadores.
El Ministerio a cargo de la propuesta es el de Desarrollo Social a través de su programa Chile Crece Contigo. La Secretaria Regional Ministerial de esa cartera, Catherine Rodríguez Astudillo, explica que con las lúdicas carpas “la idea es que los niños tengan finalmente un espacio para poder trabajar, interactuar y aprender pero que, además, sea divertido para ellos”.
Desde pizarra hasta títeres tienen los habitáculos que ocupan poco espacio pensando en que éstos a veces son escasos en las viviendas. “Se trata de promover que el niño deje de utilizar un celular o un juego electrónico y utilice su imaginación”, asegura Mariel Orellana, del programa Chile Crece Contigo de San Miguel.
“Nuestro Alcalde, don Luis Sanhueza Bravo, considera que toda instancia lúdica con la cual se pueda aprender lo cognitivo y temas de desarrollo social e imaginación, sirven para mejorar la educación de nuestros niños y niñas”, dice el Administrador de la Ilustre Municipalidad de San Miguel, José Luis Rodríguez. Y, ya hay resultados porque el trabajo que se realiza para los estudiantes san miguelinos es reconocido. Según el Jefe Provincial de Educación, Ricardo Villegas Ordóñez, “nos enorgullece- como Ministerio- tener una comuna y una Dirección de Educación tan proactivas, tan importantes para apoyar a los colegios con recursos económicos, materiales y humanos para que salgan adelante”.
Como Educadora de Párvulos, para la Directora de Educación de la Corporación Municipal de San Miguel, María Eugenia Romero, lo importante es desarrollar habilidades en los niños y, además, que sean felices porque “la felicidad de un niño es impagable”.
Carolina Vera Hernández
Jefa de Comunicaciones
