EGRESAR DEL LICEO EN PANDEMIA

Esfuerzos estudiantiles

 

A poco tiempo de rendir la Prueba de Transición para la Admisión Universitaria, estudiantes de los dos Liceos dependientes de la Corporación Municipal de San Miguel relatan como ha sido estudiar este año 2020.

 

La crisis sanitaria provocada por el Covid-19 generó cambios sustanciales en el modo de enfrentar la educación. Primero con guías y luego vía online, los estudiantes se vieron enfrentados a complejas realidades para acomodarse a la nueva realidad. “Siempre he sido un alumno que ha estudiado y ahora con la pandemia he tratado de que no sea la excepción. Sin embargo, igual hay que considerar que estar encerrado en la casa y el trabajo en el computador no es tan emocionante como las clases presenciales. Al menos yo he llevado a cabo mis deberes en mis estudios. Pero igual, bastante afligido por el encierro”, cuenta Daniel Flores Castro, estudiante de 4° año Medio A del Liceo Andrés Bello. Tiene 17 años y su pasión por argumentar, debatir y leer lo motivan a seguir adelante para poder estudiar Derecho.

La misma carrera quiere aprender Flaviana Morales Cavieres, del 4° Año Medio A del Liceo Betsabé Hormazábal de Alarcón. Tiene 18 años. A  ella la motiva el poder trabajar por la deuda que la sociedad tiene con las niñas y niños en cuanto a vulneración de derechos. Este 2020 “ha sido un sube y baja de emociones en estrés, incertidumbre, con ganas de terminar pronto y de la manera mejor posible. Ha sido un año en el que he estado bien, feliz, sintiéndome la dueña del mundo, pudiendo con todo, pero, también, he estado muy estresada. No sabía que hacer con las guías, era mucho trabajo, no tenía el espacio suficiente en mi casa para hacerlo; así que era frustrante pero me daban más ganas de seguir para salir adelante”, dice.

Daniel habla también por sus compañeros asegurando que “han puesto de su parte y no han dejado que la pandemia los frene; que les gane la pelea. Ellos han cumplido con su deber, con sus trabajos”.

Para enfrentar la Prueba de Transición Daniel refuerza sus conocimientos en un preuniversitario y Flaviana comenzará uno en cuanto termine el año lectivo.

Ha sido duro, pero como argumenta Flaviana “esto es pasajero, no es algo que va a estar siempre conmigo. Va a ser un proceso que es difícil, pero no imposible. Soy una fiel creyente en que las cosas pasan por algo, que nuestros destinos ya están trazados, entonces no podía quedarme a llorar sobre la leche derramada cuando hay mucho que hacer todavía”.